En la entrada anterior, expliqué los diferentes estilos de apego, y cómo el desarrollo de un estilo de apego seguro entre el cuidador y el niño genera las condiciones óptimas para el desarrollo psicosocial de éste.
En los años 40 del siglo pasado, el psiquiatra John Bowlby introdujo por primera vez la idea de que la calidez, la afectividad física y la sintonía emocional eran fundamentales para el correcto desarrollo de los niños.
«No me gusta trabajar con pacientes enamorados. A lo mejor es por envidia – yo también deseo ese encantamiento. A lo mejor es porque el amor y la psicoterapia son fundamentalmente incompatibles. El buen terapeuta lucha
Comenzando con la corriente Psicodinámica, las diferentes terapias que la conforman hunden sus raíces en el psicoanálisis de Freud, que surgió en los primeros años del siglo XX. Freud fue, en realidad, el creador de la psicoterapia moderna
No todos los psicólogos trabajamos igual. En psicología hay diferentes escuelas o enfoques, con formas particulares de entender y abordar los problemas psicológicos. Aunque todas las terapias tienen elementos comunes
En relación con la necesidad de orientación, las personas intentamos buscar explicaciones del «cómo» y «por qué» de las cosas. Esto no tiene por qué ser un problema, salvo cuando esa búsqueda de respuestas nos mantiene enfocados
En su libro «Una mente liberada: La guía esencial de la Terapia de Aceptación y Compromiso» (2019), Steven C. Hayes, co-fundador de esta terapia, establece que todos los seres humanos compartimos básicamente seis anhelos fundamentales
Desde la perspectiva de ACT, cuando hablamos de «aceptar» nuestros pensamientos, sentimientos o sensaciones corporales, no estamos hablando de que haya que «resignarse» a estas experiencias o de que haya que ver el «lado positivo»
Hoy he leído en un artículo algo así como que» las personas que han sido diagnosticadas con una enfermedad crónica desarrollan con frecuencia cuadros psicopatológicos, como ansiedad y depresión». Siempre me revuelvo
La Terapia de Aceptación y Compromiso (también conocida como ACT, leído como una palabra, por sus siglas en inglés) pertenece a la denominada “tercera generación” de terapias de la tradición cognitivo-conductual.
En la entrada anterior, expliqué los diferentes estilos de apego, y cómo el desarrollo de un estilo de apego seguro entre el cuidador y el niño genera las condiciones óptimas para el desarrollo psicosocial de éste.
En los años 40 del siglo pasado, el psiquiatra John Bowlby introdujo por primera vez la idea de que la calidez, la afectividad física y la sintonía emocional eran fundamentales para el correcto desarrollo de los niños.
«No me gusta trabajar con pacientes enamorados. A lo mejor es por envidia – yo también deseo ese encantamiento. A lo mejor es porque el amor y la psicoterapia son fundamentalmente incompatibles. El buen terapeuta lucha
Comenzando con la corriente Psicodinámica, las diferentes terapias que la conforman hunden sus raíces en el psicoanálisis de Freud, que surgió en los primeros años del siglo XX. Freud fue, en realidad, el creador de la psicoterapia moderna
No todos los psicólogos trabajamos igual. En psicología hay diferentes escuelas o enfoques, con formas particulares de entender y abordar los problemas psicológicos. Aunque todas las terapias tienen elementos comunes
En relación con la necesidad de orientación, las personas intentamos buscar explicaciones del «cómo» y «por qué» de las cosas. Esto no tiene por qué ser un problema, salvo cuando esa búsqueda de respuestas nos mantiene enfocados
En su libro «Una mente liberada: La guía esencial de la Terapia de Aceptación y Compromiso» (2019), Steven C. Hayes, co-fundador de esta terapia, establece que todos los seres humanos compartimos básicamente seis anhelos fundamentales
Desde la perspectiva de ACT, cuando hablamos de «aceptar» nuestros pensamientos, sentimientos o sensaciones corporales, no estamos hablando de que haya que «resignarse» a estas experiencias o de que haya que ver el «lado positivo»
Hoy he leído en un artículo algo así como que» las personas que han sido diagnosticadas con una enfermedad crónica desarrollan con frecuencia cuadros psicopatológicos, como ansiedad y depresión». Siempre me revuelvo
La Terapia de Aceptación y Compromiso (también conocida como ACT, leído como una palabra, por sus siglas en inglés) pertenece a la denominada “tercera generación” de terapias de la tradición cognitivo-conductual.
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